“El dinero está evolucionando y los humanos tendrán que vivir en un mundo donde bitcoin (BTC), otras criptomonedas y monedas digitales de bancos centrales (CBDC) coexisten en un entorno financiero cada vez más híbrido, que continuará durante muchas décadas”.
La frase la pronunció la empresaria salvadoreña Mónica Taher durante una entrevista con CriptoNoticias. Ella, como conocedora del ecosistema de las criptomonedas, habló sobre el futuro del dinero y lo que se construye en El Salvador con bitcoin.
Observa que el mundo está experimentando cambios debido a las diferentes formas en que se percibe el dinero.
Por eso, Taher está convencida de que la humanidad está pasando por un proceso de transformación, que no sucederá rápido, ni será tan simple como presionar una tecla para que todos puedan usar criptomonedas.
“Así como los cambios en el sistema financiero tradicional no ocurrieron de la noche a la mañana, no habrá un día en que todos digan: ‘el dinero fiduciario ya no existe’, todos ya tenemos criptomonedas’. Y por eso creo que todavía nos queda mucho camino por recorrer para llegar allí, será una etapa que probablemente ninguno de los que estamos vivos ahora podremos ver porque eso está muy lejos”.
Mónica Taher, empresaria salvadoreña.
Y aunque queda un largo camino por recorrer antes de que se consoliden los cambios que inició Bitcoin desde su nacimiento en 2009, lo que viene hay que afrontarlo con educación, según la exfuncionaria del gobierno de El Salvador y empresaria de la industria de las criptomonedas.
“Creo que todos tenemos la tarea de educarnos, especialmente las mujeres, que debemos empoderarnos, crear nuestro propio colchón económico, tener nuestros ahorros e inversiones, y después de eso, Continuar educándonos, especialmente sobre tecnologías futuras.llámelo Bitcoin, criptomonedas o Inteligencia Artificial (IA)”.
Mónica Taher, empresaria salvadoreña.
Bitcoin como el dinero que lo cambia todo
El futuro del dinero no está predeterminado y, a medida que avanza el proceso de transformación, parece haber una competencia constante entre quienes impulsan la centralización del sistema financiero y quienes impulsan la descentralización.
En el liderazgo del cosmos centralizado están los gobiernos, mientras que bitcoin figura como el rey del ecosistema descentralizado.
Entonces, en este panorama cambiante y competitivo, mientras algunos Estados exploran la potencialidades de las CBDC, otros regulan la industria de bitcoin con regulaciones restrictivas para “proteger” su sistema ya establecido desde antaño.
Por eso Taher cree que El Salvador se encuentra en una posición privilegiada para enfrentar el futuro. No siempre fue así. Sin embargo, desde 2021 el país viene impulsando su propia transformación financiera con bitcoin como moneda de curso legal.
En ese momento, Taher era directora de Asuntos Tecnológicos y Económicos del gobierno de El Salvador, por lo que formó parte del equipo que impulsó el cambio que va de la mano de la primera de las criptomonedas.
Ella cree que otros países de América Latina seguirán los pasos de El Salvador con bitcoin, por lo que CriptoNoticias le pidió que les prepare una especie de guía, que incluya los cuatro elementos que considera esenciales para adoptar el criptoactivo como moneda de curso legal.
En ese sentido, Taher dijo que los cuatro elementos son: educación, planificación, transparencia y planes para gestionar la inducción negocio.
“Cualquier país que desee adoptar bitcoin como moneda de curso legal, Hay que reforzar la legislación con educación, de lo contrario nunca habrá adopción masiva. También debe haber una planificación para no caer en el ensayo y error en el que muchos caen a la hora de establecer las reglas que marcarán el camino que seguirán todos los participantes de la industria”.
Mónica Taher, empresaria salvadoreña.
Luego menciona la transparencia como el tercer elemento importante para los Estados que deseen adoptar el criptoactivo. Cree que los gobiernos deben tener en cuenta que “las operaciones que realizan con bitcoins validan el esfuerzo que hace una nación en cuanto a la implementación de una legislación”.
Como cuarto y último elemento, Taher se refirió a la gestión de la inducción o constitución de empresas del ecosistema.
“Si lo que se quiere es atraer inversión, se requiere una buena gestión de activos. inducción para empresas, tanto en español como en inglés, con la idea de facilitar el trabajo a cualquier equipo, aclarando dudas y minimizando el tiempo para adaptar su operativa a la nueva legislación”.
Mónica Taher, empresaria salvadoreña.
El Salvador, una tierra privilegiada
A medida que el mundo avanza hacia el futuro del dinero, Mónica Taher cree que El Salvador se encuentra en una posición privilegiada, principalmente por un par de razones. El primero de ellos se debe a que, hasta ahora, ha sido el único país que se ha centrado en “un idea, tan audaz y tan innovadora, como lo es adoptar bitcoin como moneda de curso legal«.
En segundo lugar, se refiere a cómo el país centroamericano atrajo empresas del ecosistema desde el momento en que el presidente Nayib Bukele dijo que El Salvador daría el paso de adoptar la criptomoneda pionera.
“Desde el momento en que se hizo el anuncio, el 5 de junio de 2021, empezamos a ver una migración de empresas que venían de México, Estados Unidos, Europa, de Singapur, de todas partes, así como de otras partes de América Latina. Y fue, en cierta medida, voy a usar una palabra en inglés que creo que es la que mejor encaja, abrumadora (abrumadora) de ver ese flujo, esa gran cantidad de empresas que literalmente migraron”.
Mónica Taher, bitcoiner y empresaria salvadoreña.
El torbellino de interés que se generó en El Salvador tras la aprobación de la Ley Bitcoin en el Congreso de la nación ha continuado en los últimos dos años. De hecho, hasta el momento, 85 empresas se han apuntado registrado en el Banco Central de Reserva (BCR) como proveedores de servicios de bitcoin, tales como custodios de activos, billeteras digitales y plataformas de procesamiento de pagos.
“Y todas estas empresas han abierto oficinas, contratado personal, que en este caso son salvadoreños, o sea que están generando muchos empleos, lo cual es muy positivo para El Salvador”, agrega Taher.
El país centroamericano está atrayendo el interés de muchas empresas que buscan establecer sus casas matrices en territorios que tienen una regulación amigable con el ecosistema bitcoin.
“Ya sabemos que, en Estados Unidos, y en otras partes del mundo, hay un problema regulatorio. Faltan reglas claras y por ende, muchas empresas que no ven un espacio seguro para sus inversiones en bitcoin u otras criptomonedas, porque obviamente tendrán que emigrar a donde haya un ecosistema más amigable, lo que hace de El Salvador una tierra privilegiada”.
Mónica Taher, bitcoiner y empresaria salvadoreña.
Falta de un plan coordinado para hiperbitcoinizar El Salvador
Taher también habla del presente y destaca el movimiento que se está dando en las comunidades de El Salvador, donde se está replicando el proyecto de economía circular bitcoin, siguiendo el ejemplo de El Zonte.
Menciona los planes que los habitantes de Berlinala ciudad ubicada en el departamento de Usulután que es impulsando la adopción de bitcoin por iniciativa propia, dejando en evidencia que se necesita un esfuerzo coordinado que tenga integración gubernamental.
“Creo que estos esfuerzos comunitarios son muy importantes, pero si no encajan o no se combinan con un esfuerzo más coherente a nivel nacional, entonces volvemos al punto de partida, porque no necesariamente habrá una adopción masiva de esta manera. Creo que debe haber un plan que pueda educar a todo el pueblo de El Salvador sobre la importancia de bitcoin para el país”.
Mónica Taher, empresaria salvadoreña.
Asimismo, reconoce la labor realizada por el la ONG Mi Primer Bitmoneda que el año pasado llevó la educación bitcoin a 10,000 salvadoreños. Sin embargo, subraya que los esfuerzos por impulsar la adopción no solo debe dejar a las comunidadess, organizaciones o empresas privadas, pero también se requiere que la participación del gobierno nacional sea más integral y de mayor alcance.
“Tenemos que pensar en educar también a la mujer, que tal vez depende del salario de su esposo en un cantón de El Salvador, y que probablemente solo podría llegar hasta el tercer grado de primaria. Tal vez tenga datos en su teléfono para poder usar Facebook o WhatsApp, pero también tal vez no. Yo creo que, para llegar a ella, tiene que haber un plan coordinado de todos, incluido el gobierno”.
Mónica Taher, empresaria salvadoreña.