El euro digital todavía no gana adeptos. En España, el desconocimiento sobre esta moneda digital del banco central (CBDC) es generalizado, tanto en la población como en los locales comerciales. Además, ya existe un rechazo popular hacia este activo centralizado, que aún está lejos de ser emitido.

Así lo sugiere la reciente estudiar de Hábitos de Uso de Efectivo elaborado por el Banco de España (BDE), que destaca El poco interés de los españoles en empezar a utilizar la CBDC europea y utilizarlo como sustituto de las formas tradicionales de dinero.

Según los resultados, sólo el 20% de unos 1.300 españoles encuestados aceptaría utilizar el euro digital como complemento a los métodos de pago actuales. Entre ellos, tarjetas, puntos de venta y efectivo. Mientras que un amplio 65% sostiene que no utilizaría el euro digital, ya que se siente cómodo utilizando los métodos de pago tradicionales.

La encuesta también muestra que sólo el 4% de los consultados Usaría CBDC para reemplazar solo el efectivo. Y apenas un 3% como alternativa únicamente a tarjetas de débito, tarjetas de crédito, puntos de venta y otras soluciones bancarias.

Asimismo, el Banco de España destaca que la edad de los habitantes influye en la intención de uso del euro digital. En todos los rangos de edad, de 18 a 65 años, existe una clara tendencia a no utilizar la CBDC una vez emitida.

Sólo los jóvenes de entre 18 y 24 años mostraron una mayor disposición a utilizar el euro digital. Pero el rechazo a este activo centralizado persiste entre esta población. Mientras tanto, los adultos mayores de 65 años Son los que menos intención tienen de utilizar CBDC. Son ellos quienes más repudian la idea del dinero fiduciario europeo tokenizado.

El euro digital es la versión tokenizada de la moneda gestionada por la Unión Europea. En este momento, el activo está en fase de implementación y su emisión está prevista para algún momento de 2025. Recientemente se informó que la CBDC europea había superado la etapa de desarrollo y que mantenía varias similitudes con bitcóin (BTC).

Los españoles no quieren CBDC

Por otro lado, el estudio del BDE muestra que sólo el 20% de la población general de España conoce la CBDC europea. Mientras que el 79% no sabe nada sobre ese activo.

El BDE destaca un ligero crecimiento en el grado de conocimiento de los españoles sobre el euro digital en cuestión de un año. En 2022, el nivel alcanzó el 17%.

La historia es similar en el ámbito de los locales comerciales y la hostelería españoles, donde El rango de conocimiento del euro digital apenas alcanza el 23%, el mismo nivel que el año pasado. Mientras que el 77% de las empresas en España dice no saber nada sobre la CBDC europea.

Es precisamente el desconocimiento sobre las CBDC lo que ha propiciado que muchos de estos proyectos en el mundo no han tenido éxito y su adopción es bastante baja entre las comunidades de base.

Esto está de acuerdo con lo sugerido por el investigador de finanzas digitales Xavier Lavayssière, quien asegura que los usuarios no bancarizados Son los últimos en aprender a utilizar las herramientas digitalescomo los necesarios para utilizar CBDC.

Un intento de detener bitcoin

Las CBDC son una versión digital y tokenizada de las monedas nacionales de los países. Es decir, Son activos desarrollados, emitidos y distribuidos por los bancos centrales.

Al igual que el dinero tradicional, estos activos están sujetos a devaluación y depreciación. Además, Están sujetos a vigilancia, supervisión y centralización. De hecho, hay estudios que advierten que, a través de las CBDC, los gobiernos pueden tener mayor control sobre las empresas.

En este momento No existe ninguna CBDC en desarrollo que sea aceptada por los ciudadanos. Incluso hay ejemplos de cómo fracasaron los proyectos de moneda digital del banco central. La e-Naira de Nigeria es una de las ejemplos de rechazo y repudio por parte de los usuarios hacia esta forma de dinero.

Esta aversión a las CBDC no se ve en bitcoin (BTC), que es el activo digital más popular del mundo y que ha encontrado un lugar en lugares donde también se avanza en la creación e implementación de monedas digitales de bancos centrales.

Hay que recordar que las CBDC nacieron como un intento de detener la adopción de bitcoin (BTC). Activos completamente opuestos y que a la vez tienen similitudes.

Creado en 2009, bitcoin permite a las personas e incluso a los gobiernos realizar pagos inmediatos y seguros, pero con la ventaja de no necesitar intermediarios para hacerlos realidad. A diferencia del dinero fiduciario físico y digital, donde se ejecuta cada transacción mediante la intervención de un tercero de confianza.

En España, La sociedad ha sabido más sobre bitcoin que sobre las CBDC. Así ha quedado demostrado con la adopción popular de BTC en el país ibérico y con la creciente comunidad de entusiastas españoles de este activo digital.

Actualmente, esa nación es la 22 en el mundo con la mayor tasa de adopción de bitcoin y otros CRIPTOMONEDAS. E incluso es uno de los países con más avances regulatorios en la región europea. Algunas de las legislaciones españolas se han adaptado a la ley MiCAque regulará el ecosistema de criptoactivos en la Unión Europea a partir de 2024.