los datos de inflación de enero (20,6%) confirma la “senda de desaceleración”, aseguró el Ministro de Economía, Luis Caputo.

Dijo que la caída “se viene observando desde mediados de diciembre, a un ritmo más rápido de lo esperado por el mercado”.

La mediana de las estimaciones de Encuesta de Expectativas del Mercado (REM) para En enero “se había ubicado en 25% y 21,9% en las publicaciones de diciembre y enero, respectivamente”, indicó Palacio de Hacienda.

Según Economía, el número de enero “aún tiene implícito un alto lastre estadístico respecto a diciembre, derivado del exceso monetario heredado y la honestidad de los precios relativos en la primera semana de la actual administración”.

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El traslado a precios de la devaluación de diciembre fue mucho menor que el salto del tipo de cambio en agosto del año pasado, indicó Palacio del Tesoro.

Señaló que “si bien en ese momento la mejora del tipo de cambio real se consumió en menos de dos meses, entre diciembre y enero la inflación fue del 51%, frente a un aumento nominal del tipo de cambio de referencia del 129%”.

“Esto ocurrió a pesar de que a partir de diciembre se liberaron otros precios que estaban muy retrasados, como los combustibles o productos de consumo masivo que estaban bajo esquemas de precios controlados”, dijo Economa.

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El programa que ejecuta el Ministerio de Economía “busca sostener y profundizar este escenario de desinflación”.

“La combinación de ancla fiscal, monetaria y cambiaria, y la normalización del comercio exterior aseguran una trayectoria inflacionaria decreciente”.

“La estabilización macroeconómica, basada en el equilibrio financiero y la honestidad de los precios relativos, es una condición necesaria para que la economía argentina entre en una senda virtuosa de crecimiento de los salarios reales y generación de empleo de calidad”, afirmó desde Palacio del Tesoro.