Representantes de entidades empresariales de todo el país asociadas a la Confederación Comercial de Hidrocarburos (CECHA), se reunió ayer para analizar la situación del sector. Si bien la agenda estuvo llena de temas para discutir, las consecuencias de la segunda etapa del Programa Precios justos en combustibles se destacó sobre el resto.
El convenio entre el Ministerio de Energía y las petroleras establece una pauta de 4 por ciento mensual en los precios de las gasolinas y el diésel del 15 de abril al 15 de agosto, en un contexto inflacionario de 9 por ciento mensual.
“Esta ecuación de déficit pone en jaque nuestra sustentabilidad”, dijo Isabelino Rodríguez, presidente de la Asociación de Comerciantes de Mendoza (AMENA) y secretaria de CECHA. “Estamos muy preocupados por las consecuencias irreversibles que conlleva esta situación”, añadió.
Es por eso que los papeleros no dudaron en solicitar una entrevista urgente con el secretario de Comercio Matas Tombolini, para explicar en detalle cómo afecta la actividad.
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“Los costos aumentan mucho más que ese porcentaje y en las condiciones actuales no podemos afrontarlos”, dijo Rodríguez. “Acordamos un aumento de sueldo con la plantilla para los primeros meses del año y no sabemos cómo lo vamos a afrontar”, advirtió.
También llamaron a participar activamente en la mesa formada por el gobierno y las petroleras, donde se debaten estos temas, a fin de brindar propuestas concretas que atemperen el grave escenario que atraviesan.
En ese sentido, Rodríguez reveló que la situación del sector ya genera preocupación en todo el continente. “La realidad de las Estaciones de Servicio argentinas se expuso recientemente en un congreso regional y nuestros compañeros no pudieron entenderla”, resaltó. “La preocupación fue tal que quedó expresada en la carta final de la CLAEC”, señaló el empresario mendocino.
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